Procurar
dejar de lado
el
abrigo que abrigó,
dejar
desnuda la piel
para
sentir al aire, bien,
que
fue él quien te arropó.
Procurar
no volver a respirar
el
amor que ya voló,
éste
aliento es demasiado bueno para despreciarlo
o
dejarlo tirado sin más,
sin
ver que aquí volvió,
el
siguiente,
volando.
Procurar
dejar que se vaya,
atentos
para cuando vuelva
celebrarlo
como si nada,
como
si la guerra acabara
o como
si muriese una estrella.
Procurar
tratarte bien en el camino,
no
separarte demasiado de tí,
de
esa esencia que te hace estar vivo,
tomar
con calma éste viaje alternativo.
Llámame cuando encuentres,
la otra parte de mí.
Procurar
no tratar de entender demasiado,
para
qué merece la pena dormir,
si
puedes estar soñando y bailando,
aunque
los demás estén pensando
que
para estar así,
ellos prefieran morir
con su latir abandonado.
Procurar
pisar tan fuerte como puedas,
que
todo te parezca bonito en el balcón de tu corazón.
Ver
fuegos artificiales en cada detalle de tu revoltosa melena
que
juega con el viento, lo imposible... y mi amor.
Procurar
encontrar el punto justo de locura
que
permite disfrutar desde dentro
lo
que te ofrezca cualquier vida,
que aunque fuera solo una
disfrutarla como si fuera la mismisima luna
la
que sellara ese pacto eterno
con
su hermosura.
Procurar
no perder el tiempo
o
perderlo para siempre.
Procurar
comprender el espacio
sobre
el que te disuelves.
Procurar
saber la verdad
cuando
procuras no procurar
o
solamente cuando te quedas como ausente
y
miras, serenamente,
cómo
se va
cómo
se va.
como
se va
…
Procurar
pisar tan fuerte como puedas,
que
todo te parezca bonito en el balcón de tu corazón,
ver
fuegos artificiales en cada detalle de tu revoltosa melena
que
juega con el viento, lo imposible... y mi amor.